parte 2 - Especial - Centenario de Abel Carlevaro (1916-2001)

Grata contribuición de Alfredo Escande – discípulo

y biógrafo de Abel Carlevaro
(breve entrevista)

(TP) - La vigencia de una Escuela de Abel Carlevaro ya se encuentra establecida y materializada, con el ideal de técnica en favor de la música – en términos generales –, pero más específicamente ¿usted tiene noticia de alguno escrito de Abel Carlevaro dedicado directamente a las llamadas “técnicas extendidas”? ¿O usted presenció una aplicación de técnica dirigida, publicada o no, pero distinguida para repertorio contemporáneo / experimental? ¿hubo algo así?

(AE) Carlevaro tenía entre sus planes escribir un trabajo sobre los recursos técnicos no tradicionales, lo que ahora suele llamarse "Técnica extendida". Alguna vez, incluso, empezamos a escribir algunos esbozos, pero otras urgencias lo fueron distrayendo de ese objetivo y no llegó a cristalizarlo. Él estaba siempre explorando posibilidades sonoras diferentes, y muchas veces presencié demostraciones suyas sobre las más variadas técnicas (tanto a solas en su estudio como durante diversos cursos internacionales). Por otra parte, una profunda conversación suya sobre esos asuntos con Maurice Ohana en París, en 1974, plasmó en una obra que fue en realidad compuesta "a dos cabezas y cuatro manos", que fue "Estelas" (la historia sobre esa obra  la escribimos en forma conjunta con Ruben Seroussi, y forma parte de mi libro sobre Carlevaro).

(TP) Aunque haya sido ya admitida la presencia de disonancias, la creación de obras como Cronomías y otras implica un cambio paradigmático en la manera de entender/sentir la guitarra, una apertura a nuevos puntos de vista, desde la escucha tradicional hacia otra diversa, la técnica ya obtenida hacia a la extendida.

¿Como ha sucedido en Carlevaro? ¿hubiera sido por el contacto con colegas y obras o podemos hablar de una especie de “espíritu del tiempo” de los años 60/70 que lo motivó?

Creo que esas motivaciones, en Carlevaro, son previas a la época que usted menciona: su contacto con Villa-Lobos en la primera mitad de los años 40 ya le empezó a "abrir la cabeza", y lo mismo podría decirse de su contacto con Ohana en el final de esa década y con Santórsola en los 60, y – lo que es fundamental – su propio espíritu inquieto y su mentalidad abierta a la búsqueda y la experimentación.

(TP) Al admitirse una Escuela de Carlevaro, en un sentido estricto, comparaciones son inevitables…  a Sor, Tárrega, los antiguos métodos de tratadistas como Sanz … y todos ellos con fuerte ligación hacia sus propias  composiciones, es decir, hacer la “escuela” implica hacer sus piezas, ejecutar sus estudios y obras. ¿A Carlevaro teníamos que hacer lo mismo? ¿debemos ir más allá de sus cuadernos de técnica?  Entonces, aunque comparaciones son en verdad imperfectas, la idea es: ¿ hacer solo su técnica ya esclarece y reduce problemas, pero hacer su escuela en total … técnica, ejercicios y - sobre todo - sus obras,  ahí, si, hay el sentido de la Escuela de Carlevaro, en total?

(AE) Creo que el sentido de la escuela creada por Carlevaro no puede agotarse en sus cuadernos de técnica. No se comprendería lo suyo si no se lo vincula directamente con una concepción estética de la guitarra, concebida en términos reales (y fácilmente percetibles si se escucha con atención sus grabaciones) como una "pequeña orquesta". Los cuadernos de técnica son apenas una ayuda para sentar las bases, para adquirir los fundamentos mecánicos que pueden conducir a una adecuada puesta en práctica de esos criterios estéticos. Por sí solos, no tienen valor (y podrían hasta resultar negativos: así me lo dijo, casi textualmente, cuando me habló de su urgencia para escribir su libro de teoría: "En Europa están usando mis cuadernos sin tener idea de cómo hacerlo y para qué sirven, y eso puede ser un desastre", me dijo; y concluyó: "tengo que escribir el libro de teoría" y fue entonces que me pidió ayuda para hacerlo).

Para adentrarse realmente en la escuela de Carlevaro es muy importante estudiar y comprender profundamente sus cinco libros de "Técnica aplicada" (sus "Masterclasses" sobre Sor, Villa-Lobos y Bach, publicados, y otro aún inédito sobre estudios de Carcassi).

Es muy importante, también, estudiar a fondo – y comprendiendo sus criterios de uso de la mano derecha, su búsqueda de colores, etc. – la música creada por él, y también analizar profundamente la forma como digitó, arregló e interpretó la de otros autores y llegar a entender sus razones para hacerlo como lo hizo.